Se me han quedado los ojos como platos cuando mi vecina me ha recomendado la lectura de algunas informaciones vía internet sobre lo que está pasando en Islandia.
En este pequeño Estado-isla de algo más de 330.000 habitantes y uno de los mayores niveles de bienestar y desarrollo del planeta está teniendo lugar una auténtica Revolución política, económica y social de la que el resto de Europa no se está ni enterando.
En Islandia se ha conseguido derribar a un gobierno, meter en la cárcel a banqueros y empresarios, nacionalizar la banca, elegir como presidenta a una mujer lesbiana, ecologista y de izquierdas (no socialdemócrata, nótese el matiz) y poner en la alcaldía de Reikiavik (la capital, que aglutina a dos tercios de la población islandesa) a un artista y cómico heredero del dadaísmo, el anarquismo y el punk que arrasó en las elecciones con una campaña que ridiculizaba a los políticos tradicionales con un humor cáustico y mordaz.
Lo más interesante del caso islandés son las repercusiones de las decisiones que se están tomando: congelación de la deuda externa, orden de busca y captura internacional de banqueros, políticos y empresarios que se han llenado los bolsillos con la especulación, creación de una comisión de investigación sobre los verdaderos causantes de la crisis económica y una avanzada legislación que puede hacer de Islandia el paraíso de la libertad de expresión y comunicación, así como una batería de medidas económicas que están poniendo los pelos de punta a los magnates de la Europa de los Mercados y del FMI.
Y a todo esto, ¿alguien se está enterando? ¿No será que a nuestros modernos, demócratas y liberales gobiernos (y quienes los controlan) no les interesa que todo esto se sepa?
Porque lo que está claro es que de las protestas que están ocurriendo en los países del Norte de África (contra regímenes dictatoriales apoyados por nuestras democracias occidentales, por cierto) sí que nos están dando cumplida información...
Ya sé que soy un poco paranoico, pero, ¿no será que nuestros progresistas gobiernos tienen miedo de que cunda el ejemplo?
¡Lean, lean!:
http://www.corneta.org/no_104/islandia_revolucion_para_europa.html
Por cierto: el enlace es de un medio de comunicación de ese país dictatorial donde no existe la libertad de expresión (según El País, por supuesto).
Cuadro comparativo de los homínidos
Hace 10 meses
Se me hace la boca agua.
ResponderEliminarQué grande.
Permiso para coger tu post y pegarlo en mi blog, es que no podría escribirlo de otra manera más sencilla o explicativa.
ResponderEliminarPor supuesto, faltaría más!!!
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ResponderEliminarIncreible lo de Islandia, aunque tampoco creo que sea la panacea, al fin y al cabo también están recortando el estado del bienestar. La soberanía ya no reside en las personas ni es democrática, desgraciadamente la tienen los señores del FMI y manipulan los países a su antojo, pero ¿a que se puede optar objetivamente hoy sino? ¿qué queda, la autarquía?. No es que me guste este mundo, pero parece que es así. Yo he encontrado un reportaje de El País (un diario que me gusta más que los de Venezuela, donde yo también opino que no hay una total libertad de expresión) sobre el tema, así que por si os interesa, la dirección es http://www.elpais.com/articulo/primer/plano/Islandia/enjaula/banqueros/elpepueconeg/20110403elpneglse_2/Tes
ResponderEliminarHombre, decir que la única alternativa al neoliberalismo es la autarquía no me parece hilar muy fino...
ResponderEliminarEse es precisamente el único argumento de los partidos que gobiernan Europa con políticas de derechas (PSOE incluido) al recortar derechos y privatizar trocitos de sector público.
En cuanto a Venezuela, dejando aparte a su presidente y el rumbo que los venezolanos, democráticamente, quieran tomar, te invito al sano ejercicio de buscar los periódicos más importantes de Venezuela y ver sus portadas: en la mitad de ellos se pone a caer de un burro a Chávez. Es cierto que El País (periódico del grupo PRISA, con importantes intereses en Venezuela) nos recuerda a diario lo dictatorial que es Chávez (creencias, apriorismos, antipatías o simpatías aparte), pero el caso es que si en un país pueden meterse con su presidente hasta ponerlo a parir, otra cosa será, pero lo que se dice en libertad de expresión, lecciones pocas podemos darles.
Objetivamente.
Y, por cierto, un buen artículo, gracias.
ResponderEliminarAunque me sigue chocando que se escriba con más de un año de dilación, y que no se mencione "el color político" de los nuevos "dirigentes".
No quiero decir que la alternativa al noliberalismo sea la autarquía, lo que quiero decir es que Islandia está "pillada por los huevos". Tiene una deuda con el FMI y con Reino Unido, y está muy bien lo que han conseguido para pagar menos intereses, pero sino pagan se les podría cortar el comercio exterior y entonces caerían en la autarquía. Es dificil que cualquier país actual no siga un modelo neoliberal, ya que hasta China tiene su raro sistema que mezcla capitalismo y comunismo. Lo que creo que hay que hacer es buscar un modelo liberal y de libre mercado pero donde haya mayor control del sistema y por supuesto que los bancos no puedan crear dinero de la nada, un modelo con mayor protección social.
ResponderEliminarAunque no puedo decir que Venezuela sea un país dictatorial, no es una democracia plenamente asentada, no son pocos los canales mediáticos que han cerrado por ser de la oposición, es como un Telemadrid a lo bestia. Aún así intentaré leer de vez en cuando un periódico venezolano, ya leo algo de argentina y chile, pero al resto de latinoamérica la verdad la tengo más olvidada, un error que debo enmendar.
Efectivamente, lo de Venezuela clama al cielo. Por ejemplo, te aconsejo esta perla:
ResponderEliminarhttp://www.talcualdigital.com/Especiales/Viewer.aspx?id=34550
No creo que ni siquiera en España se pudieran escribir artículos así sin que nuestro estado de derecho se encargara de procesar al periodista por calumnias. Sin embargo, nos repiten desde El País que en Venezuela no hay libertad de expresión y resulta que le damos la razón a Göering: una mentira repetida 100 veces se convierte en una verdad irrefutable. Por supuesto que España no es Venezuela (ni en niveles políticos, ni económicos, ni sociales), pero al pan, pan.
No comparto tu optimismo por un sistema de libre mercado "social". La esencia del libre mercado es el liberalismo, la autorregulación. Una de las premisas del liberalismo es que el sistema se debe regular desde la ley de la oferta y la demanda.
Tenemos un grave problema en el sistema educativo, Txema, y es que no nos enseñan las reglas básicas de la economía. El liberalismo (o capitalismo) sólo funciona si hay una masa de gente dispuesta a trabajar por una cantidad mínima de salario y si hay posibilidades de lucro en el negocio. Además, es cíclico, y las crisis son inevitables, porque forman parte del ciclo económico (son los periodos de reajuste en los que se hacen las reformas necesarias para que todo vuelva a su estado normal, es decir, donde los pobres no se suban a la parra y los derechos sociales no amenacen al negocio).
El caso de los bancos es palmario: es el propio sistema liberal el que hace NECESARIO que los bancos CREEN dinero, es una de las bases de la economía: sin que fluya el crédito, sin que los bancos se lucren financiando las inversiones, no hay negocio. Podría regularse un mínimo con una banca pública fuerte, pero (¡sorpresa!) los gobiernos europeos están eliminando los últimos resquicios de banca pública (en España, por ejemplo, se eliminó Caja Postal y, hoy día, se están privatizando las cajas).
Así que esto es lo que hay. Yo soy pesimista. Creo lo que dijo aquella antigualla de hace 100 años: socialismo o barbarie.
El de la frase me parece que fue del cabrón de Goebbels. El periódico venezolano si que creo que podría publicarse en España, lo que no creo es que al público le guste tanta exageración, aunque sea antichavista, jeje. Aún así como tampoco sé mucho sobre el periodismo Venezolano no digo nada, jeje.
ResponderEliminarCon respecto a la economía, yo en la carrera si que doy economía, estudio veterinaria y las granjas tienen que ser viables económicamente o no tienen futuro. Sí que el capitalismo tiende a reducir los salarios para abaratar costes, pero ya se encargó marx de salvarlo al exponerlo en El Capital y por ello se empezaron a subir los salarios tras la II guerra mundial para que existiera capacidad adquisitiva y por tanto consumismo. No se, la economía es muy complicada, los economistas tampoco saben como resolver los problemas que tienen. Yo sí que creo que un modelo liberal-social podría funcionar, simplemente se funcionaría con la ley de la oferta y la demanda, pero tendría un par de sectores estratégicos en manos del estado. Además las prestaciones sociales son importantes y a base de impuestos a las empresas se podría conseguir el dinero. Aún así no creo que se debiera permitir que existieran empresas tan grandes como las multinacionales, pero es que en el mundo actual si un país dice que no las quiere sus empresas se irán a otro país, ya lo vemos en el caso de la deslocalización. Es muy complicado, pero de momento sigo creyendo que un modelo liberal puede tener el suficiente equilibrio social mediante regulación estatal o internacional